El Sueco, no mueco

Tomé el bus hacia la terminal para ir a Gamboa y ahí me encontré a un Sueco que iba para el canal. Como el canal queda de ida para Gamboa, decidí acompañarlo y después seguimos al pueblo, parando primero en un zoológico que encontramos en el camino.

Al llegar a Gamboa no sabíamos que había para hacer, así que le pregunté a una señora que estaba sacando el perro y nos dirigió a la casa de una viejita gringa que hospedaba gente y nos mencionó de un lugar alto donde podíamos ver todo el canal. Caminamos por ahí, vimos varios ñeques y después de un rato llegamos a una plataforma altísima desde donde se podía ver el canal.

Ya eran como las cinco y cuarenta y el próximo bus pasaba a las siete y media. Afortunadamente, la gringa iba a ir a la ciudad de Panamá y nos llevó.

AL otro día, decidí volver a caminar por Casco Viejo y me volví a encontrar con el sueco. Caminamos por ahí, fuimos al mercado donde venden pescado, y terminamos en el irrecorrible (por lo grande) mall de Albrook al lado de la terminal de transporte. Como era Miércoles y el cine era a mitad de precio, nos vimos Avatar.